Microsoft nos recuerda en su página web que el 29 de Julio de 2019, su sección de ebooks dejará de funcionar.
Si, en efecto Microsoft ha decidido cerrar su store de libros. Y este artículo no va de la irresponsabilidad, ni tiene nada que ver como va a gestionar Microsoft las devoluciones (devolverá el dinero pagado por cada libro). Tiene más bien que ver con la frase los libros dejarán de funcionar. Por más que lo pienso siento que hay algo malo inherente a esa frase.
EL DRM de la discordia
¿Cómo puede ser esto? pensareis algunos. Bueno hace algún tiempo que en la industría de la propiedad intelectual se dieron cuenta de que la piratería en internet era todo un nuevo mundo contra el cual debían combatir. Y por eso decidieron crear lo que hoy en día conocemos como DRM - o Digital Rights Management.
En su obsesión por evitar el pirateo en un mundo en el que cada vez resultaba más y más fácil copiar decidieron inventar una tecnología que muchos pensarán le sobra a la humanidad.
Ahora, años después, una compañia decide cerrar una sección de su empresa y dejar así de ofrecer este servicio, y en este ejemplo se pone claramente de manifiesto que a través del DRM nosotros no somos los propietarios finales de los productos que compramos.
Imaginad si creasen libros que se auto destruyen al cabo de 10 años. Este es el despropósito que crean las nuevas tecnologías. Microsoft al no renovar las licencias y los derechos pone fin a su servicio y los libros vuelven a su estado original - la inexistencia.
Llevo algo de tiempo dándole vueltas a esa frase: Los libros dejarán de funcionar el 29 de Julio.